Inteligencia Artificial: El sustento de las valuaciones en las empresas
Insights
Durante los últimos tres años, los mercados financieros han sido impulsados por el aumento acelerado en la inversión en inteligencia artificial. Desde el lanzamiento de ChatGPT, las principales empresas tecnológicas —Amazon, Google, Microsoft, Meta Platforms, Oracle y Apple— han incrementado de manera significativa el capital destinado a infraestructura y capacidad de cómputo.
En 2023, estas compañías invirtieron 164 mmdd en CapEx; un año después, esta cifra ascendió a 250 mmdd y, de acuerdo con estimaciones de consenso, podría llegar a 412 mmdd en 2025 y a 543 mmdd para 2026, reflejando la intensidad del ciclo de modernización tecnológica. Sin embargo, aunque estas inversiones han sido el principal motor del crecimiento de los mercados, la magnitud del gasto ha generado preocupación entre algunos inversionistas sobre qué tan sostenible puede ser en el mediano plazo.
Frente a este debate, existen dos elementos que ayudan a poner en perspectiva la solidez financiera de estas compañías:
- En primer lugar, han logrado acompañar el crecimiento del precio de sus acciones y de sus inversiones en capital con un aumento en ingresos. Mientras que, en conjunto, las 500 empresas del S&P 500 han mostrado un crecimiento promedio de 4.8% en los últimos tres años, este grupo lo ha hecho a una tasa cercana al 10.0%.
- En segundo lugar, los flujos libres de caja permanecen positivos. Entre 2022 y 2028, estas compañías generarán alrededor de 1.7 billones de dólares, suficiente para cubrir buena parte de un CapEx acumulado de 2.6 billones. Incluso en los años de mayor gasto, como 2026 y 2027, el flujo libre alcanza 296 mmdd y 243 mmdd, respectivamente, lo que confirma que el ritmo de inversión sigue siendo financieramente saludable.
Nuestros modelos sugieren que el sector de Tecnología seguirá liderando los rendimientos del S&P 500 durante el próximo año. Además, el aumento en poder computacional continuará extendiéndose hacia otros elementos clave de los centros de datos, como energía, conectividad, enfriamiento y una selección más especializada de chips. Con este panorama, el consenso reciente ubica al S&P 500 alrededor de 7,500 puntos, por encima de los 6,850 puntos estimados previamente, reflejando una expectativa de crecimiento más amplia y sostenida en el sector.